¡Soberanía individual! Cree en ti: eres divino y lo has olvidado. La medicina actual fomenta la enfermedad, no la salud: lo denuncio en mi libro “La mafia médica”.Estoy griposo, ¿qué me receta?
–Nada.
¿Ni un poquito de Frenadol?
-¿Para qué? ¿Para tapar síntomas? No. ¡Atienda a sus síntomas, escúchese! Y su alma le dará la receta.
Pero, ¿me meto en la cama o no?
–Pregúnteselo usted mismo, y haga lo que crea que le conviene más. ¡Crea en usted!
¡A los virus les da igual lo que yo crea!
–Ah, ya veo: elige usted el papel de víctima. Su actitud es: “He pillado una gripe. Soy víctima de un virus. ¡Necesito medicinas!”.
Pues sí, como todos…
–Pues allá usted… Mi actitud sería: “Me he regalado una gripe. ¡Soy la única responsable! Debo cuidarme un poco”. Y me metería en cama, reposaría, me relajaría, meditaría en cómo me he maltratado últimamente…
¿Se ha “regalado” una gripe, dice?
–¡Sí! Tu enfermedad viene de ti, no viene de fuera. La enfermedad es un regalo que tú te haces para encontrarte contigo mismo.
Pero nadie desea una enfermedad…
–Tu enfermedad refleja una desarmonía interior, en tu alma. Tu enfermedad es tu aliada, te señala que mires en tu alma, a ver qué te sucede. ¡Dale las gracias: te brinda la ocasión de hacer las paces contigo mismo!
Quizá sea más práctica una pastillita…
–¿Hacer la guerra a la enfermedad? Eso propone la medicina actual, y las guerras matan, traen siempre muertes.
No me dirá ahora que la medicina mata…
–¡Un tercio de las personas hospitalizadas lo son por efectos medicamentosos! En Estados Unidos, 700.000 personas mueren al año a causa de efectos secundarios de medicamentos y de tratamientos hospitalarios.
Morirían igual sin medicamentos, oiga.
–No. No si cambiamos el enfoque: la medicina actual ha olvidado la salud, ¡es una medicina de enfermedad y de muerte! No es una medicina de salud y de vida.
¿Medicina de enfermedad? Acláremelo…
–En la antigua China, un acupuntor era despedido si su paciente enfermaba. O sea, ¡el médico cuidaba de la salud! ¿Ve? Toda nuestra medicina es, pues, el fracaso total.
Prefiere medicinas alternativas, pues…
–Respetan más el organismo que la medicina industrial, desde luego: homeopatía (¡será la medicina del siglo XXI!), acupuntura, fitoterapia, reflexoterapia, floriterapia, masoterapia… Son más baratas… y menos peligrosas.
Pero no te salvan de un cáncer.
-¡Dígale eso a la medicina convencional! ¿Te salva ella de un cáncer?
Puede hacerlo, sí.
–Lo que hará seguro es envenenarte con cócteles químicos, quemarte con radiaciones, mutilarte con extirpaciones… ¡Y, encima, cada día aparecen más cánceres! ¿Por qué? Porque la gente vive olvidando su alma (que es divina): la paz de tu alma será tu salud, porque tu cuerpo es el reflejo material de tu alma. Si te reencuentras con tu alma, si la pacificas…, ¡no habrá cáncer!
Palabras bonitas, pero si un hijo suyo tuviese un cáncer, ¿qué haría usted?
–Alimentaría su fe en sí mismo: eso fortalece el sistema inmunitario, lo que aleja al cáncer. ¡El miedo es el peor enemigo! El miedo mina tus autodefensas. ¡Nada de miedo, nada de sumisión al cáncer! Tranquilidad, convicción, delicadeza, terapias suaves…
Perdone, pero lo más sensato es acudir a un oncólogo, a un médico especialista.
–La medicina convencional debiera ser sólo un último recurso, y muy extremo… Y si tu alma está en paz, eso jamás te hará falta.
Bien, pues tengamos el alma pacificada… pero, por si acaso, pongámonos vacunas.
–¡No! Las fabrican con células ováricas de hámster cancerizadas para multiplicarlas y cultivarlas en un suero de ternera estabilizado con aluminio (eso la de la hepatitis B, con su virus): ¿inyectaría usted eso a sus hijos?
Les he hecho inyectar ya varias…
–Y yo a los míos: fui médico, y por entonces no sabía aún todo lo que hoy sé… ¡Pero hoy mis hijos no vacunan ya a sus hijos!
Yo creo que seguiré vacunándolos…
–¿Por qué? La medicina actual mata moscas a martillazos: no siempre muere la mosca, pero siempre rompe la mesa de cristal. Son tantos los dañinos efectos secundarios…
¿Por qué abominó usted de la medicina?
–Yo me hice médico para ayudar. Me dediqué a la flebología, a las varices. Llegué a tener varias clínicas. Pero fui dándome cuenta del poder mafioso de la industria médica, que atenta contra nuestra salud, ¡que vive a costa de que estemos enfermos! Lo denuncié… y me echaron del Colegio de Médicos.
O sea, ya no puede usted recetar…
–¡Mejor! Los medicamentos están fabricados pensando en la lógica industrial del máximo beneficio económico, y no pensando en nuestra salud. Al revés: si estamos enfermos, ¡la mafia médica sigue ganando dinero!
¿Y a quiénes tilda de “mafia médica”?
–A la Organización Mundial de la Salud (OMS), a las multinacionales farmacéuticas que la financian, a los gobiernos obedientes, a hospitales y a médicos (muchos por ignorancia)… ¿Y qué hay detrás? ¡El dinero!
No escoge usted enemigos pequeños…
–Lo sé, pero si me hubiera callado, hubiese enfermado y hoy estaría ya muerta.
¿Cuál ha sido su última enfermedad?
–Hace dos días, ja, ja… ¡una diarrea!
Vaya: ¿qué reflejaba eso de su alma?
–Oh, no sé, no lo he analizado… Me he limitado a no comer… ¡y ya me siento bien!
Pero se pasa mal, ¿eh…?
–Ja, ja… Si la enfermedad te visita, ¡acógela, abrázala! ¡Haz la paz con ella! No salgas corriendo como loco en busca de un médico, de un salvador… Tu salvador vive dentro de ti. «Tu salvador eres tú».¡Tú eres Dios!
“Los hombres olvidan siempre que la felicidad humana es una disposición de la mente y no una condición de las circunstancias.“ John Lodke
La mente es como un paracaidas , funciona cuando esta abierta
AUTOCONOCIMIENTO INTEGRAL 
Reblogueó esto en Respira-Inspira.
doctora, ghislaine, su filosofia me parece lo maximo, siempre he querido una tener una asesoria de esta indole, fui vendedor de medicamentos en mi vida laboral y siempre pense en lo que U.D. plantea. la felicito, aqui en medellin (colombia) no he podido consegui su primer libro, LA MAFIA DE LA MEDICINA, me gustaria comprarlo. Gracias por ayudar ala humanidad,. le cuento que soy un creyente de las bondades del alma. GRACIAS.
Habría que ser cínico para pensar a la enfermedad como un proceso fortuíto. Tanto la medicina científica como la tradicional, tienen sus métodos; lo que es inaceptable es que alguien piense que la enfermedad se soluciona con la aplicación de un remedio. Alguna vez, no recuerdo quién, que que «una vida sin reflexión no vale la pena ser vivída». Yo lo aplico a la enfermedad.
Besos, muy buen reportaje.
Suscribo cien por cien las ideas del artículo. Me alegra mucho leer opiniones como ésta porque a veces pienso si mis ideas son una locura, sobre todo teniendo en cuenta que he tenido dos crisis de lo que llaman trastorno bipolar. Decidí no tomar medicación y aprovechar la desarmonía de mmi mente para encontrarme conmigo misma y recuperarla. Creo que lo estoy consiguiendo. He dejado también de tomar la medicación prescrita para tratar el cáncer de mama de que fui operada hace cuatro años. Los inhibidores de la síntesis de estrógenos me hacían encontrar cada vez peor y ahora tengo una osteoporosis galopante. Pienso que de los tratamientos al uso para combatir el cáncer se conocen bien los efectos secundarios negativos y los positivos no dejan de ser una mera hipótesis. Creemos que la ciencia médica tiene un gran control sobre la salud, pero eso no es más que la idea que nos inculcan desde pequeños para convertirnbos en conejillos de indias y hacernos esclavos de los medicamentos. La medicina actual tiene un desconocimiento evidente del organismo humano como un todo en el que cuerpo y mente son indicociables y una visión miope de la evolución del mundo microbiano ante los medicamentos, de las interacciones entre los seres vivos, de la influencia de los factores ambientales en la expresión génica, de los mecanismos de evolución y respuesta a los cambios ambientales, de la capacidad del propio organismo para sanarse, de la importancia de las buenas relaciones humanas en la salud y un largo etc. Se limitan a dividir el cuerpo en partes, a interpretar síntomas y describir enfermedades que confirmen sus ideas. Tal vez sería bueno que la medicina y los médicos hiciesen una cura de humildad y reconocieran su ignorancia. Les remito a una frase de Bacon «Para dominar la naturaleza primero hay que obedecerla»
Buenas!
Hace años que descubri el libro de la «Mafia Medica» y cambio mi vida, os recomiendo el libro «La Enfermedad como Camino», personalmente soy Terapeuta y hace ya tiempo que adopte el principio de que «No existen enfermedades, sino personas enfermas».
Os invito a que leais un articulo basado en estos principios en;
http://www.psicohipnos.com/saludenfermedad/
un saludo
Hola. Porque creo que «todo sucede para el bien de los que Dios ama», estoy convencida de que me he encontrado con su artículo «Tu enfermedad es tu aliada, no tu enemiga». Sé que es así Ghislaine Lactot. Doy cursos de Reiki y trabajo con grupos, con el único fin de que, cada vez vayamos tomando más consciencia de que es nuestra responsabilidad TOMAR NUESTRA VIDA EN NUESTRAS MANOS Y SABER QUIENES SOMOS EN REALIDAD. Creo en tu experiencia y se que no es fácil, pero también se que ¡merece la pena!. Tu artÍculo me servirá para el próximo encuentro. ¡GRACIAS!
Ana.
HOLA, gracias por publicar esta confesión, de parte de una médica.
Muy bueno.
Comparto todo lo que dice; yo hace año y medio que dejé mi profesión que enfermaba mi alma, soy contadora en retiro efectivo y ahora medito, hago reiki para mi y amores, limpio mis pensamientos, busco la alegría, no tomo medicinas, pinto, y me conecto con Dios, el sol y la tierra y busco dentro mío las causas de cada problema y la solución a cada uno que SIEMPRE ESTÁN DENTRO MIO
Un abrazo y gracias
Ste
Que bueno «escuchar» esto de una médica!! Gracias! Es exactamente lo que pienso desde hace años y a mis hijas (hoy de 25 y 27) las crie casi sin medicinas, aunque las vacunas eran obligatorias y por razones de inclusion social debi darselas!…
Y son sanas! Y me salud se basa en eso, escuchar mi cuerpo y hacerle caso, cada dia vamos aprendiendo mas de el!!
Es cuestion de empezar a probar y constatar por si mismo los resultados. Coraje! se puede!!
Excelente articulo… Gracias por su mensaje, cada dia mi ser se percata de recordar toda esta información de la cual tengo conocimiento, pero por una u otra razon, me distraigo y es el momento de retomar…
Mil Gracias hermosa mujer ex doctora de mundo, Gracias por ser Doctora del Ser.
Amor, paz y bendiciones 😀 Hasta luego =)
Hola: Hace más de dos años que optè por la medicina alternativa para mi familia y…!!!vaya qué cambio¡¡¡. Ahora mis hijos de 3 y 10 años ya no conocen los remedios farmaceúticos pero sí la miel, el propòleo, la similia, entre otras. Tambièn cambiamos nuestros hàbitos alimenticios, pero lo principal, ha sido cambiar nuestra posiicòn con repsecto a la vida, aprender a vivirla, aprender a querernos, a conocernos y entender nuestro cuerpo. No es una tarea fácil, tomando en cuenta que es una idea universalmente arraigada, pero el intento vale 100% la pena.