Paso a paso, caminar es una forma poderosa de mantenerse en forma. Pero además de los beneficios para el cuerpo, caminar tiene un gran beneficio para la mente: combate la ansiedad, el estrés y ayuda a encontrarse con uno mismo.
La caminata consciente con poder antiestrés
Utilizado durante siglos como una forma de meditación, la caminata consciente es un eficaz antiestrés que puede combatir la depresión, la ansiedad y la inquietud que ocasionalmente nos asalta sin razón.
Si sientes ansiedad, empieza a caminar: moverse ayuda a liberar las emociones, alivia la tensión muscular y pone en circulación a las endorfinas .
Algunas investigaciones han verificado que caminar ayuda a mejorar los resultados de la psicoterapia, porque actúa en el plano físico, pero también involucra la esfera emocional .
Cómo y dónde empezar a caminar conscientemente
Haz un descanso para salir específicamente a caminar: día tras día se convertirá en un hábito agradable, útil para mantenerse en forma, luchar contra los momentos de nerviosismo y ayudarte a encontrar un espacio de silencio interior .
Sin embargo, ten cuidado de no convertir la caminata en una conversación interminable: si puedes deja tu móvil en casa. Recuperarás lentamente la conexión con tus emociones profundas, dejando que los pensamientos y preocupaciones del día se vayan, paso a paso.
No olvides una botella con agua y posiblemente un par de gafas de sol. Elija tus zapatos y ropa para caminar con cuidado .
Según un estudio reciente, el mejor momento para salir a caminar es entre 10 y 12: la luz solar ayuda a la producción de vitamina D, hasta el punto de estar indicado para prevenir enfermedades y deficiencias óseas.
En el trabajo aprovecha la oportunidad del descanso para desconectarte y salir al aire libre, 10 minutos son suficientes para recargarte de energía .
Inhala profundamente, sostén por un momento, luego deja salir el aire muy lentamente imaginando que cada pensamiento se funde con el aire y se disuelve en el sol.
Visualizar una preocupación o problema lo ayuda a encontrar una solución efectiva.
La mente puede ir en mil direcciones.
Pero sobre esta hermosa senda, camino en paz.
A cada paso, un suave viento sopla.
A cada paso, se abre una flor. Thich Nhat Hanh
Caminando en la naturaleza para combatir la ansiedad
Descubre la zona alrededor de donde vives: las zonas de arte y los parques naturales serán una oportunidad para sumergirse en la historia y la belleza de lugares cercanos, a menudo desconocidos. Cuando nos encontramos con nuevas inspiraciones, recibimos un soplo de oxígeno que puede involucrar el cuerpo y la mente.
Muchas investigaciones han demostrado el poder antiestrés de la naturaleza: respirar profundamente, observar el verde y los árboles, altos y fuertes. Cierra los ojos y comienza a sentir la fuerza de la Tierra dentro de ti, que desde tus pies hasta tu cabeza te rodea en un abrazo milenario.
Caminar reduce la presión arterial, mejora la circulación, disminuye el riesgo de ataque cardíaco y enfermedad cardiovascular, te mantiene en forma y te ayuda a tonificar.
Además, es una actividad gratuita que puedes practicar en cualquier lugar: haz de tu caminata diaria tu ritual de bienestar y lleva este hábito contigo incluso de vacaciones.
Estas en el mar? ¡Adiós zapatos! Cuando caminas descalzo estimulas las terminaciones nerviosas mejorando la oxigenación de los tejidos y te encuentras contacto con la Tierra.
Investigaciones recientes realizadas en la Universidad de Michigan, en los Estados Unidos, han demostrado que caminar regularmente en la naturaleza ayuda a superar la depresión debido a enfermedades y duelo, nos hace sentir más fuertes y aumenta la energía vital.
Muy buen artículo, gracias por compartir!